viernes, 4 de junio de 2010

Borussia Mönchengladbach Vs Real Madrid 1985/86



OCTAVOS DE FINAL (IDA)
Fecha: 27-11-85; Estadio: Bokelberg (Dusseldorf).
BORUSSIA MONCHEN. (ALE) - REAL MADRID CF 5-1
Arbitro: Agnolin (Italia)
Goles: 1-0 Mill 36´; 2-0 Salguero (pp) 40´;
3-0 Rhan 55´; 4-0 Rhan 58´; 4-1 Gordillo 69´;
5-1 Lienan 83´.
BORUSSIA MONCHENGLADBACH, 5;
Sude, Krisp, Herlousen, Hannes, Frontzeck, Borowka, Bruns,
Rahn, Lienen, Mill, Criens (Drehsen 64´).
REAL MADRID CF, 1;
Ochotorena; Chendo, Salguero, Maceda, (Butragueño 62´), Camacho, Michel,
Gallego, Martín Vázquez (Santillana 64´), Gordillo, Hugo Sánchez, Valdano.



El Real Madrid fue arrasado en Düsseldorf

El equipo de Molowny sólo reaccionó cuando ya perdía por cuatro goles de diferencia

J. D. GONZÁLEZ ENVIADO ESPECIAL - Dusseldorf - 28/11/1985


El Madrid fue otra vez vapuleado en la RFA. El Borussia consiguió un 5-1 que deja la eliminatoria de los octavos de final de la Copa de la UEFA muy negra para un Madrid que anoche vistió de morado hasta su, fútbol.Con Butragueño en un banquillo integrado únicamente por delanteros -excepto el meta Agustín-: Juanito, Santillana, Cholo y el propio Buitre-, estaba claro que Luis Molowny iba a basar la resistencia de su equipo en un prudente 4-4-2, con Martín Vázquez por la derecha para tapar a Frontzeck, una especie de Gordillo alemán más musculoso. La idea no era mala, pero con lo que no contaba el técnico madridista era con que el joven jugador se mostrara incapaz de frenar a tan potente rival.


Sin embargo, una de las primeras jugadas pudo alterar el rumbo del partido. Fue en el minuto tres, cuando Maceda cabeceó hacia abajo un centro desde la izquierda y el balón se estrelló en el poste derecho del portero Sude. Ahí se acabó el ataque madridista, que comenzó a ceder metros, aunque manteniendo un tono de seriedad y cierta firmeza atrás, con Chendo frente al peligroso Mill y Salguero ante Kriens. Del lado alemán, el teórico defensa derecho, Krisp, actuó un poco más arriba, emparejándose con Gordillo, mientras Borowka era el marcador de Valdano o Hugo, en función de que uno u otro entrase por la derecha o la izquierda.

A la vista de que el Madrid ofrecía esa considerable solidez en sus marcajes, pero no triangulaba en la media y los pocos balones que llegaban arriba eran desaprovechados por Hugo Sánchez, cuya baja forma resulta ya más alarmante que la del Buitre, el Borussia se atrevió definitivamente a intentar arrollar a su adversario. Hacia la media hora, el encuentro entró en una fase de fuerte presión germana y quedó convertido en un traje a la medida para el otras veces criticado Maceda. El libre internacional se multiplicó en sus cruces, mientras Ochotorena, con sobriedad, cerraba cualquier posibilidad de gol. El meta madridista detuvo un remate de Burns y dos de Mills antes de que llegase la acción crucial. Fue en un balón que salió allaramente varios centímetros por la línea de fondo, tras un paradón de Ochotorena, pero el árbitro dejó seguir la jugada y acabó en el primer gol del Borussia. La desgracia madridista iba a acrecentarse apenas tres minutos después, cuando la enésima colada por la izquierda del lateral Frontzeck volvió a dejar sentado a Martín Vázquez y terminó con el desafortunado patadón del reaparecido Salguero hacia su propia portería.

Molowny retiró a su mejor jugador de la defensa, Maceda, para dar entrada al Buitre, bajando a Gallego al puesto de libre. Y poco más tarde hizo salir a Santillana en lugar del desangelado Martín Vázquez. El gol de Gordillo, con un Madrid ya lanzado con la desesperación del naúfrago hacia una tabla salvadora, pareció abrir ligeramente un portillo a la esperanza para el Bernabéu. Pero el Borussia, que se dejó sorprender en el gol madridista, en la confianza del que se sabe rotundo ganador, aún tuvo opción para conseguir el quinto de su cuenta y cerrar casi todas las opciones a su contrincante.
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Valdano: "La crisis ha explotado con este resultado vergonzoso"

J. D.. G. - Düsseldorf - 28/11/1985


De cromos 80´s


"La crisis del equipo ha explotado con este resultado de escándalo, vergonzoso". La frase de Jorge Valdano definió anoche la situación. Ramón Mendoza, el presidente del Real Madrid, quiso mantener "la serenidad necesaria tras un partido así", pero se le entendió con claridad: "Nos hemos equivocado; hemos jugado con mucho miedo al principio y muy encogidos. Así, en caliente, nunca es bueno adoptar medidas. Habrá que estudiar con detenimiento la situación".El argentino Valdano, rotundo, añadió: "Es hora de que el equipo se conciencie de la situación, que no se pongan paños calientes y encaremos el futuro con esperanza. Debemos reaccionar, como ya se hizo en este mismo torneo la temporada anterior, pero siempre enfrentándose a las cosas con sinceridad y valentía".

Mendoza agregó: "Ha sido un partido triste, extraño, mal jugado por nosotros y con una actuación también mala del árbitro. El equipo ha estado con nervios, pero no es un problema de autoridad o no autoridad, sino de desconcierto y descontrol, que hay que analizar con profundidad. Pesde luego, la procesión va por dentro, pero hay que procurar mantener la cabeza fría porque todo lo que se dijera en estas circunstancias sería contraproducente. Esto supone un tremendo golpe y es muy malo para todos. En fin, veremos qué medidas se pueden tomar".

Hugo Sánchez se lamentó inicialmente, como casi todos sus compañeros, del primer gol: "En una jugada dudosa, nos cortó el ritmo en la defensa porque hasta ese momento habíamos controlado el partido". El mexicano tuvo que admitir que, "evidentemente, pasa algo en el equipo. No salen las cosas. Falta entendimiento y agrupación. Hay individualidades, pero falla aún la conjuncion necesaria". Y, tras la rotundidad, la insinuación: "Hugo es una pieza importante en función de lo que el equipo desarrolle en el campo porque mis características son las de combinar jugadas. Pero, si no se construyen, no se llega a finalizar y nada sale bien".

Molowny: "El fútbol es así" Luis Molowny, el técnico, se limitó a señalar: "Hasta el minuto en que recibimos el primer gol controlamos el partido. Los chicos dicen que el balón había salido en esa jugada. Pero el fútbol es así. Es una noche triste, pero el Borussia también es un gran equipo. De empezar de nuevo el partido, haría el mismo planteamiento".

El entrenador madridista, tras las dos derrotas anteriores en la Liga, en las visitas al Barcelona y al Valladolid, comentó que se había tratado, simplemente, de "dos tropiezos y..., cosas del fútbol".

Gordillo se quejaba también del primer gol; por otra parte, su expulsión obedeció a que, según el colegiado, escupió a Krisp tras una fricción entre ambos. Maceda, el defensa libre, que era uno de los pocos que estaba rindiendo bien, fue retirado a poco de iniciado el segundo tiempo y sufre una artritis traumática en su tobillo izquierdo como consecuencia de un fuerte golpe recibido ya en el primero. El doctor Herrador le infiltró e incluso le sacó sangre; es baja segura para el partido del próximo domingo frente a la Unión Deportiva Las Palmas.

El Madrid salió hacia el aeropuerto de Colonia, localidad próxima a Düsseldorf, poco después del descalabro frente al Borussia. El equipo tenía previsto llegar a las cuatro de la madrugada al aeropuerto madrileño de Barajas.

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OCTAVOS DE FINAL (VUELTA)
Fecha: 11-12-85; Estadio: Santiago Bernabéu.
REAL MADRID CF - BORUSSIA MONCHEN. (ALE) 4-0
Arbitro: Mc Ginlay (Escocia)
Goles: 1-0 Valdano 7´; 2-0 Valdano 20´;
3-0 Santillana 78´; 4-0 Santillana 90´.
REAL MADRID CF, 4;
Ochotorena; San José (Cholo 76), Camacho, Maceda, Salguero,
Juanito (Martín Vázquez 76´), Michel, Gallego, Valdano, Butragueño, Santillana.
BORUSSIA M., 0;
Sude, Herlovsen (Herbst 54´), Hannes, Frontzceck, Krisp (Hochtatter 46´),
Criens, Lienen, Demsen, Borowka, Mill, Rahn.

De ----------------HOME------------------


De años 80 (color)



El Madrid borró al Borussia con un fútbol simple

El recurso continuo a las cabezas de Valdano, Santillana y Maceda destruyó a la defensa alemana

ALFREDO RELAÑO, - Madrid - 12/12/1985

El Madrid eliminó al Borussia de Moenchengladbach gracias a su más reconocida cualidad: el espíritu de lucha y la capacidad de sacrificio. No hizo un fútbol brillante, pero sí borró del campo al Borussia y explotó hasta el límite su baza ganadora: la capacidad de Valdano, Santillana y Maceda para alcanzar los balones altos. El Borussia salió encogido y nunca fue capaz de afrontar seriamente el partido. Se encajó en su área y esperó que pasaran los minutos. Le faltó uno para clasificarse. El viejo prestigio del Bernabéu resucita definitivamente tras este resultado que, como los de la temporada anterior frente al Anderlecht y el Inter, será comentado en toda Europa.El Madrid salió a jugar con muchas bajas, pero supo readaptarse a lo que tenía. Mandó a Santillana, Valdano y Maceda al área y se dedicó a echar balones altos allí. El coraje de los demás y el presumible desconcierto del Borussia, en el que cabía confiar, podrían poner el resto. Y así fue.

En el minuto 18 el Madrid iba muy por delante del horario previsto. Dos centros de Juanito habían sido cabeceados por Valdano. Estaba claro que el Borussia no tenía tanta gente alta en la defensa como para resolver el problema de los tres cabeceadores madridistas, y la fórmula iba camino de dar resultados todavía mejores de lo esperado. No importaba que Butragueño siguiera algo confuso, alternando algunas acciones eficaces con otras carentes de sentido, in¡ que Salguero mostrara una alarmante, inseguridad defensiva. El Madrid movía bien el balón atrás con Gallego, que esocogía siempre la opción adecuada; y Juanito y Camacho subían por la banda izquierda lo bastante como para situarse en posiciones de centrar. Con eso había suficiente.

El Borussia dio una imagen demasiado pobre, que hace pensar hasta, qué punto está creciendo el prestigio del estadio Bernabéu, que llega a encoger el ánimo de los contrarios hasta los extremos de lo ocurrido anoche con los alemanes. Allí nadie quería la pelota, si no era para mandarla de un voleón a la grada. Sólo Lienen, conocido por los jugadores madridistas como el cardehal Richelieu, por su curiosa perilla, y Criens intentaban de cuando en cuando alguna salida por la banda izquierda, intentando explotar la baja forma de San José o los nervios de Salguero, pero el Madrid los frenaba con falta o sin ella.

Si en el descanso no habían caído más de dos goles fue porque el Madrid incurrió bastantes minutos en la absurda tentación de jugar bien la pelota, de organizar un fútbol bien ligado en la línea media, y se olvidó de la ventajista e inelegante, pero muy útil, fórmula de enviar el balón arriba lo antes posible. Hubo, en la segunda mitad del primer tiempo, fases desalentadoras, en las que dio la sensación de que la victoria se iba a escapar. Pero en la segunda, el equipo insistió hasta el infinito en la búsqueda de las cabezas de los tres hombres altos de la delantera. Gallego, desde su propio campo, optaba casi siempre por enviar desde 40 o 50 metros a la cabeza de Valdano, que actuaba como un repetidor, recogía la señal, y la desviaba hacia alguno de sus compañeros de ataque. El Borussia, que se había asentado algo con la reflexión que siempre proporciona el descanso, jugó algo más seguro atrás en esta segunda parte, y gracias a eso retrasó los goles.

Pero en el minuto 73, en una de las pocas acciones de buen fútbol que hizo el Madrid, Gallego, Michel y Santillana construyeron el tercer gol, y el Borussia volvió a empaquetarse en su área, dispuesto a olvidarse de cualquier cosa que no fuera apretar los dientes y los puños, echar los balones a la grada y esperar el minuto 90. El Madrid también apretó los puños y los dientes, pero en vez de echar, balones a la grada los echaba al punto de penalti. Fueron pasando así ocasiones en las que la avalancha fracasaba en el último momento por falta de suerte o por lo atropellado de los remates.

Pero el Madrid era ya a esas alturas un camión sin frenos y el Borussia estaba llamado a caer. Santillana, un hombre que está llevando con actitud elegante su suplencia, tuvo la inmensa alegría de cazar el gol decisivo en el último minuto, cuando ni siquiera había tiempo para temer que el Borussia pudiera replicar.

El estadio, como era de esperar, se vino abajo. La siempre reconocida capacidad del Madrid para superarse en las competiciones europeas ha llegado en las dos últimos temporadas más lejos que nunca. Y ahora, además, ha acabado con el fantasma que le perseguía: el mito del fútbol alemán.



Juanito: "Esto ha sido una hazaña para la historia del fútbol"

Santillana marcó ayer su gol 42 en competición europea

De cromos 80´s


J. D. G., - Madrid - 12/12/1985

Los jugadores del Madrid expresaron anoche con rotundidad sus sentimientos. En casi todos, una frase, que resumieron Juanito y Santillana, al unísono, casi con rabia: "Estas gestas sólo puede consegirlas el Real Madrid". Juanito iba más lejos: "Esto ha sido una hazaña para la historia del fútbol español". Los veteranos madridistas vivían su revancha particular. Santillana marcó ayer su gol número 42 en competiciones europeas.

Juanito sí tenía ganas de hablar anoche. Había realizado un gran partido y, tras el éxito, la borrachera dialéctica: "No es un momento para hablar de reproches, pero en éste país se intenta rebajar la categoría de la gente. Se ha llegado a decir de Santillana y de mí que estábamos acabados, es increíble, porque luego llegan estas gestas y algunos se lo tienen que tragar. Pero ahora mismo me da igual todo eso, he sido internacional con mi país, he jugado dos mundiales, he vivido jornadas y títulos con el Madrid, pero remontar lo de esta noche ha sido algo inmenso, superior, el día más feliz de mi vida".Santillana marcó ayer su gol número 42 con la camiseta blanca en competiciones europeas. Sus dos tantos de ayer hicieron el número 12 en la Copa de la UEFA, y lleva anotados otros 11 en la Recopa y 19 en Copa de Europa. Es el máximo goleador en la historia del club en Recopa y UEFA, y sólo le superan en la Copa de Europa: Di Stéfano, 49 goles; Puskas, 35; Gento, 31; Amancio, 21.

Era el momento también para la resaca tras la victoria: "Es una pena lo que ocurre en España, han intentado echar abajo a jugadores veteranos de este equipo, a desmerecer las cualidades de gente con un prestigio sólido en Europa".

Michel hablaba de "la fe, la raza y la casta de este equipo", y de como empujó con el aliento el cuarto gol". Y Valdano -ocho goles en sus dos temporadas en la Copa de la UEFA- filosofaba, según costumbre, con en una frase del doctor Oliva, el médico de la selección argentina: "Sentirse cansado no es estar cansado", a propósito de que veía la eliminatoria muy complicada, hasta que llegó el tercer gol y volvimos a irnos arriba".

Y el argentino -ocho goles ya en sus dos temporadas madridistas en el torneo de la UEFA- sonreía, irónico, cuando alguien le recordaba que desde el club, y desde sectores externos al mismo, le han pretendido involucrar en los problemas del banquillo blanco la temporada anterior y la actual.

Retransmisión

Ramón Mendoza tardó en contestar afirmativamente a la urgente proposición de RTVE para ofrecer el encuentro en diferido. Hace unos días "se le ofreció esta posibilidad a Televisión y nos contestaron que el partido no interesaba". Mendoza, junto con el gerente Fernández Trigo, mantuvo contactos telefónicos desde los vestuarios con representantes de RTVE, antes de aceptar "por la afición del Madrid y la española".

El presidente madridista manifestó que las sanciones pendientes a los jugadores tras el partido de Dusseldorf seguían adelante "porque está establecido en convenio y el Madrid es un club serio, no es un tópico, es leyenda".

Luis Molowny el entrenador madridista, pasó ya sus peores momentos. Anoche se mantuvo en su línea habitual: Siempre he dicho que tengo una plantilla de 21 jugadores, todos capacitados para jugar, porque para eso están el Madrid. ¿Milagro? Si se llama milagro al partido que han hecho los chicos, que han ganado de forma meritoria..".

A partir de hoy, quedará también para el club el taquillaje de 93 millones y las protestas de numerosos aficionados que no pudieron acceder a su localidad e indicaron su intención de presentar denuncia en alguna comisaría cercana. Fernández Trigo manifestó al respecto: "Estamos desbordados, la gente se queda en los pasillos y no deja acceder a la localidad a otras personas. Es humanamente imposible solucionar esta situación".
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